Por Gilberto Lima
En los últimos días, e intensificándose en las últimas horas, hemos observado a connotados dirigentes político pedir al Presidente del Partido de la Liberación Dominicana, ex Presidente de la Republica, Dr. Leonel Fernández, respetar y acatar el mandato del Comité Político de reformar la Constitución y permitir al presidente Danilo Medina presentarse en el 2016.
Nada tan absurdo. Es como pedir a un devoto cristiano que crea en Jesucristo. Desde la decisión misma del Comité Político, Fernández acató la decisión apoyando la conformación de una comisión impulsora de lo resuelto en Juan Dolio, el pasado 19 de abril
Tal y como planteó el Secretario General del PLD, Reinaldo Pared Pérez, Senador de la Republica y precandidato a la nominación presidencial por su partido, la propuesta sería enviar el proyecto al Congreso de la Republica; para ver la suerte que allí corra, como finalmente se hizo.
Hasta ahí, no se ve intensión alguna del presidente Leonel Fernández por vetar esa iniciativa, decidida mayoritariamente por el Comité Político de la organización que él preside y que, como se sabe es el organismo que traza la línea legislativa.
A mi humilde entender, en ese aspecto, como en otros, se utiliza la táctica persuasiva para hacer lucir a Leonel Fernández como el irreverente o como el malo de la película que no es.
Leonel no está en contra de la decisión del Comité Político. No. Y en su discurso, el pasado 25 de mayo lo dejó bastante claro. Que se modifique la constitución pero que sea el pueblo quien lo decida a través de un Referendo y en la posterioridad, cuando se quiera buscar un culpable, no se vea al PLD, sino a una realidad social y soberana.
Eso, de ninguna manera, puede llamarse insubordinación ni que no acate la decisión del Comité Político.
Que por convicción y principios Leonel Fernández no comparta la idea de que se modifique la Constitución para beneficiar a nadie en particular es una cosa pero curarse en salud y desvincular al Partido de la Liberación Dominicana de tal decisión es otra.
Más claro ni el agua. Incluso, en vez de subordinación, lo que se vio en el discurso fue desprendimiento y humildad. Él sería el primero en volver a las calles cuando, a través del Referendo Aprobatorio, se busque cambiar la Constitución. Recordemos que El aseguró, promovería el SI, en lugar del NO.
Esas emisoras y programeros que cobran por tildar de irrespetuoso al ex presidente Leonel Fernández saben que no lo es. Y saben además que igualmente cobrará a adversarios cuando quieran atacar al partido que modificó la Carta Magna para aprobar la reelección, en caso de esta aprobarse sin consenso.
Por buena paga que sea el deudor hay que ponerlo a firmar. Eso viene a hacer el Referendo, por si al fin de cuenta, al buen pagador le diera por ponerse moroso.
Comentarios
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario, Tu comentario es importante y siempre será de utilidad para mejorar!